CABALLOS QUE EDUCAN
BENEFICIOS
LA INTERACCIÓN FÍSICA
En esta relación el humano sale muy beneficiado en varios aspectos que pasaremos a reseñar.
La simple compañía del caballo mejora nuestra salud física y emocional. Influyendo, entre otros aspectos, en nuestra coherencia cardiaca. Este concepto, se empezó a desarrollar por el Dr. Childre, especialista en reducción del estrés y fundador del HearthMath Institute de California, en 1995.
Coherencia es el término que se utiliza en la ciencia para describir un estado en el que sistema nervioso, cardiovascular, endocrino e inmune trabajan en armonía y de modo eficaz. Esta coherencia física es indispensable para que nuestra salud se mantenga en un estado óptimo. Cuando un sistema es coherente no se desperdicia energía. En estado de estrés el corazón no está en armonía con el resto del organismo. También se ve influida la respiración que se agita. Podríamos decir que la variabilidad de nuestro ritmo cardiaco muestra nuestros diferentes estados emocionales.
El caballo posee una pauta cardiaca coherente, nos puede influir a través de las ondas electromagnéticas que produce su corazón; por su volumen, 5 veces mayor que el del humano, puede alcanzar un área de influencia de unos 14 metros, el nuestro abarcaría un metro y medio, aproximadamente.
Los caballos poseen un cerebro emocional que es capaz de conectar perfectamente con el del humano, saben leer en nosotros y darnos feed-back. No se ven influidos por nuestra mente racional que tantas veces nos ayuda a auto-engañarnos a través de la justificación a posteriori de nuestras decisiones y conductas.También nos pueden ayudar a través de otro tema curioso: Gustave Zander (1835- 1920) fue un médico sueco que diseñó por primera vez máquinas de ejercicio y afirmó que las vibraciones transmitidas al cerebro con 180 oscilaciones por minuto, estimulan el sistema nervioso simpático.
En 2016 el Doctor Rieder, Jefe de la Unidad Neurológica de la Universidad Martín Luther de Alemania, midió estas vibraciones sobre el dorso del caballo al paso e, increíblemente, corresponde exactamente a los valores que Zander había recomendado.
Así mismo podríamos decir que, a través del balanceo, el ritmo y el calor podría recordar en nuestro inconsciente una relación maternal.
BENEFICIOS QUE PODEMOS CONSEGUIR
Este trabajo, a diferencia de la equinoterapia y la hipoterapia, no está dirigido a las personas con enfermedades sino a la idea de desarrollo personal; aunque muchos de nuestros clientes tienen síndrome de Down, de Asperger, TDA, TDAH, han sido víctimas de malos tratos o de acoso escolar o laboral, tienen dificultades para controlar su enfado que rápidamente se trasforma en ira, etc; pensamos que trabajar desde la enfermedad puede marcar límites para conseguir el desarrollo de las potencialidades.
Durante las sesiones llevamos a cabo una serie de ejercicios psico-físicos y vamos trenzando la confianza entre los tres: el facilitador equino, el facilitador humano y el cliente. Realizamos ejercicios grupales e individuales. En los grupales trabajamos con los sistemas, tanto organizacionales como familiares.
En ellos se descubren las “pequeñas manadas” que puede haber dentro de las “manadas”. Se trabaja el liderazgo formal y el natural, la cohesión de grupo, los estilos y vías de comunicación …
En los individuales ayudamos a que las personas sientan una mayor fuerza y confianza en sí mismos, que aprendan a apreciarse, que breguen mejor con las dificultades de su vida etc.
En nuestro trabajo nos auxiliamos de muchas técnicas: diversos ejercicios con la respiración, visualizaciones, Mindfulness, Focusing, Hipnosis y autohipnosis, modificación de conducta, técnicas de trabajo en grupo (trabajo con grupos inteligentes), etc.